viernes, 7 de agosto de 2009

Rando al valle del Arpa

En medio de un intercambio de correos en el e-group de la ex-rama salió la idea de una salida por el día en randoneé.

El destino elegido fue al Arpa, un centro de ski bastante particular. Hace algunos años un austríaco compró todo un cordón de cerros cerca de Los Andes, en un sector llamado Campos de Ahumada, y acarrea grupos pequeños de gringos en un pisa nieve adaptado como micro. Una especie de transantiago enchulado. Sube a los gringos a la punta del cerro por un "módico" precio y los recoge abajo. 4 subidas por 100 lucas. Llame ya.
El domingo 2 de agosto a las 7 de la mañana partimos rumbo al Arpa 4 personas: Alberto Ugalde, Juan Pablo Montes, Andrea Muñoz y Pablo Silva.

El camino hasta el "Refugio Avalanchas", punto de partida de la excursión, fue bien variado. Por carretera hasta Los Andes y luego un camino rural que va entre lomas y caseríos. Los últimos 8 Km estaban bien malos, pero el jeep de Alberto pasó sin problemas.

Partiendo desde el refugio Avalanchas


El auto quedó estacionado junto al refugio a 2.600 m de altitud. Pagamos el permiso para hacer rando ($8.000 por persona) y empezamos la subida rumbo al cerro Blanco (3.610 m).

Mientras subíamos por el valle nos topamos un par de veces con el pisanieve cargado de gringos que nos miraban como bichos raros por ir caminando. Se unió al grupo Martín, un guía de ski que se había quedado abajo de la micro por falta de cupo y que andaba con equipo de rando. Nos acompañó toda la subida.


Andrea Siguiendo la huella del snowcat. Al fondo Juan Pablo.


Luego de casi 4 horas llegamos a la cumbre del cerro Blanco y nos quedamos disfrutando de la vista en 360°. Se veía el Aconcagua, el Juncal y hacia la costa el Roble y La Campana.


Vista hacia el Valle La Honda

Juan Pablo con el Aconcagua a sus espaldas

Andrea y Alberto. Atrás la Punta Guanaco.



Para bajar nos separamos en dos grupos: Andrea y Alberto se devolvieron por el valle, mientras Martín, Juan Pablo y yo hicimos una pequeña travesía y bajamos por una ladera bien empinada, que exigió bastante, sobre todo en la parte alta.


Martín y Juan Pablo en la travesía




Martín apurado para encontrarse con sus clientes


Juan Pablo "Kilómetro Lanzado" Montes


Luego de casi 900 m de esquí y un par de caídas estrepitosas empalmamos con la ruta de ascenso y llegamos al auto. El resto, volver a Santiago y una detención obligada a comer algo, esta vez en el McDonald's.

De regreso

Galería completa acá: http://www.flickr.com/photos/cordillera/sets/72157621855211059/